Aún en febrero y llovió copiosamente en la zona central de Chile. Muchos, entre los que me incluyo, le dimos la bienvenida al otoño austral, con su viento, su atmósfera más suave y sus colores, ¡pero no sus CALORES! y es que no ha bajado de 32 grados la temperatura desde hace unos 10 días, y no falta nada para el equinoccio de otoño. Ya el sábado cambiamos, ¡otra vez! la hora y quedaré a seis horas de la de Europa dentro de 15 días , como suele suceder cíclicamente, ¡Ays!
¿Dónde guardo ahora las medias, los chalecos de media estación y los zapatos cerrados que deben cohabitar en mi limitado closet --nunca el espacio es el adecuado, no sé por qué, jeje-- con las cosas livaianas adecuadas para los calores! se ve cada pinta, como injertos de mono en loro.... paciencia
1 navegantes han recalado y opinado:
Hola,Alemamá, por una vez estamos empatados, porque hoy es en Madrid el primer sábado en que hemos podido salir sin jersey, en manga corta, sentarnos en una terraza a tomar café.
Ahí acaban las coincidencas: todos los árboles están rompiendo en flores, mientras que supongo que en Chile pronto saldrán las hojas doradas.
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